La enfermedad cerebrovascular o ictus es uno de los motivos más frecuentes de asistencia neurológica urgente, representa una de las primeras causas de muerte en nuestro país.

Diferenciamos principalmente dos tipos de accidentes cerebrovasculares: ictus isquémico (disminución de flujo sanguíneo, secuelas menos graves), e ictus hemorrágico (rotura de arteria, donde existe mayor gravedad).

Es importante  el papel de la fisioterapia, independientemente del tipo de Ictus que exista.

La neurorrehabilitación es una especialidad que requiere del inicio precoz de tratamiento y de la incorporación de un equipo multidisciplinar: médico, neurólogo, pedagogo, fisioterapeuta, terapeuta ocupacional, psicólogo, enfermero…

Muy importante también es cuidar los factores de riesgo modificables, y cambiarlos antes de que sea demasiado tarde. Con esto nos referimos a la hipertensión, diabetes, alcohol y drogas, colesterol, obesidad y sedentarismo. Factores que cada día oímos más, y que la mayoría de las veces, no somos conscientes del daño que nos pueden provocar.

Es imprescindible mantener un estilo de vida saludable, evitar el sedentarismo, llevar una alimentación sana y equilibrada y descansar.

Para comprobar la aparición del ictus, hacemos referencia a las siglas FAST: face, arm, speech y  time.

• FACE

Hazle que sonría. Así puedes comprobar si la boca se tuerce hacia uno de los lados, esta parálisis es un síntoma de ictus.

• ARM

Pídele que levante ambos brazos o se siente y levante las piernas a la vez, Si no tiene fuerza, estamos ante un síntoma de ictus.

• SPEECH

Hazle preguntas concretas.  Si al responder  cambia el orden de las sílabas o pronuncia mal, puede ser síntoma de ictus.

• TIME

¡Actúa con rapidez y llama a urgencias!

Las 3 primeras horas desde el inicio de los síntomas son clave para la recuperación del paciente

El abordaje multidisciplinar de esta enfermedad es imprescindible para un correcto manejo de cada persona, puesto que las manifestaciones clínicas son muy diferentes e individuales. Recordemos que tratamos con personas, ¡no con patologías!

El fisioterapeuta será el encargado de “completar” una parte de la recuperación del paciente mediante fisioterapia respiratoria, y cardíaca; reeducación de la marcha, cabeza y extremidades, control y aprendizaje motor, estabilidad, coordinación, equilibrio, movilidad, educación y apoyo.

Bisbe, M., Santoyo, C., Segarra, V. Fisioterapia en neurología. Procedimientos para restablecer la capacidad funcional. Madrid: Panamericana, 2012

M. Murie-Fernández, P. Irimia, E. Martínez-Vila, M. John Meyer, R. Teasell, Neurorrehabilitación tras el ictus, Neurología, Volume 25, Issue 3, 2010